jueves, junio 29, 2006

Aslan

composición original, si la quieres, la bajas. El mapa de Narnia al fondo.

Estoy casi terminado el séptimo libro de las Crónicas de Narnia. Buenos. Por curiosidad vi en Wikipedia una reseña de los libros y me han contado el final del último que estoy leyendo, que horror. Pero no importa. Haber devorado siete libros de más de doscientas páginas en dos meses es una hazaña para mí. Es rico cuando una lectura te atrae, cuentos donde la mitad la pones tú, te imaginas las cosas que no te cuentan, como cuando escuchabas los radio teatros: Lo que cuenta el viento, quien no se murió de miedo con los cuentos del siniestro Doctor Mortis. Es fascinante, despertar tu imaginación, la tenías escondida en un rincón de la mente. Tal como lo dice C. S. Lewis, autor de los relatos de Narnia, la importancia no está tanto en el texto sino en el receptor, y en la manera en que ese texto es recibido.

Algunas veces se sueña con leones: dorados, inmensos, imponentes. Ese es mi segundo nombre, sí, no es un apellido como lo llevan otros, ni segundo nombre es León. Algún experto diría que es un llamado del subconsciente en la etapa del sueño. Majestuosos sobre dunas de desiertos brillantes bajo cielos azulosos, o destellando en la oscuridad de ciudades de grises concretos, en mundos donde nadie ha estado. Siempre dicen algo, o advierten que algo sucederá. Como aparece en estos cuentos. C. S. Lewis, habrá soñado con él? De una estrechísima amistad con J.R.R. Tolkien (autor de el Señor de los Anillos), se convirtió al cristianismo, luego de ser ateo por muchos años.

Aslan habla con Edmundo, después de que éste los ha traicionado, Edmundo reflexiona que ha obrado mal

Aslan, el nombre de este León en los cuentos, que no es más que la traducción de león en turco, se les aparece a los protagonistas de estas historias; generalmente niños; cuando menos lo esperan: él hace que las cosas sucedan o dirige sutilmente las acciones estos pequeños héroes sin que ellos lo sepan. A veces como una aparición, otras veces sólo es visto por los que creen en él (la edad hace dejar de creer, como muchas cosas), a veces como una gran León dorado para los que ya han perdido las esperanzas y piensan que es sólo una leyenda, él aparece cuando ya se da todo por perdido, da fuerzas a sus aliados y atemoriza a los adversarios, saca lo mejor de cada uno, y hace recapacitar de las flaquezas o malos pensamientos.

Estos libros tienen muchos simbolismos y paralelismos con historias bíblicas y reales. Narnia existe, es un pequeño poblado cercano a Roma, donde floreció el arte renacentista, fue destruida y vuelta a construir, como el fénix. Estos relatos hablan de magia, seres mitológicos y misteriosos (dríades, sátiros, centauros, dragones, animales parlantes), claro, también de conspiraciones, de maldad; pero también hablan de la camaradería y de la amistad desinteresada, del valor que aparece en los momentos difíciles. Si tus intenciones son buenas y justas, la fortuna te favorecerá, no importando cuan fuerte sea tu enemigo.

Jadis, la bruja blanca, en el relato original, el trineo es tirado por renos, pero en la película son osos polares, genial.

comenten · es gratis · vamos · retroalimentacion · posteado por sercon a las 12:02 4 escribieron y dijeron